Deporte a partir de los 60

Cada vez son más las personas que empiezan a hacer deporte, pero ¿Te has preguntado alguna vez por qué? ¿De dónde viene tanto interés?

No cabe duda de que los beneficios del ejercicio físico en las personas mayores, y de cualquier edad, son tantos que si empezáramos a hablar de ello no terminaríamos nunca. Para eso, existen ya estupendos libros y guías en internet que hablan sobre el tema. Además, cualquier edad es buena para practicar algún u otro tipo de actividad física.

                                                        


¿Qué pasa entonces si nunca he hecho ejercicio físico? ¿Cómo empezar a hacer deporte?

El primer consejo es, tómatelo con calma. Toca empezar ya, pero sin prisa.

Si es la primera vez que te planteas hacer actividad física, empieza por algo pequeño. Por ejemplo, si decides salir a caminar, no empieces caminando dos horas seguidas. Puede parecer obvio, pero hay gente que lo hace, y al día siguiente están que no pueden ni moverse. Y eso no es lo que buscas ¿verdad? Quizás, con que empieces con 15 minutos diarios será más que suficiente.

También es importante que te marques rutinas. ¿El motivo? De esta manera, harás ejercicio casi sin pensarlo. De la misma manera que te vistes, o te cepillas los dientes. Te pondrás tus zapatillas deportivas y empezarás a caminar. Por tanto, si es cada día a la misma hora, mejor que mejor.

¿Ya estás listo? ¿Preparada para comenzar? Espera… ¡Un momento!

Piensas que no te gusta ir solo al gimnasio, o que no te apetece salir a caminar sola. De acuerdo, pues empecemos por ahí.


Un compañero o compañera para hacer ejercicio puede servir para que ambos os motivéis mútuamente. Os llamáis y quedáis cada día a la misma hora para ir al gimnasio. Sí, puede estar bien, pero no todo son ventajas. Si algún día e él o ella no puede venir, no lo pongas como excusa para no salir a caminar. Quizás lo mejor sería ir cambiando: de vez en cuando vas solo, y otras veces acompañado. Ya sabes que la variedad nunca aburre.

Y si tienes pensado apuntarte a algún gimnasio, ahí seguramente conocerás gente. Sobre todo si vas siempre a la misma hora, o te apuntas a alguna actividad en grupo, será fácil que coincidas con las mismas personas.

Gimnasia en casa

Esta es otra opción que no deberías dejar de considerar. Aunque por qué no, una combinación de las dos opciones también podría resultar interesante.

El ejercicio en casa cuenta también con una serie de ventajas. Por ejemplo, no importan las condiciones atmosféricas. Aunque fuera haga frío, calor, lluvia, nieve, eso ya no nos servirá de excusa para saltarnos nuestra sesión deportiva.

¿Qué no sabes qué ejercicios hacer? En Youtube hay una gran cantidad de vídeos gratuitos con ejercicios de todo tipo. Solamente tienes que encontrar el que mejor se adapte a tu estado de forma física.

Si la opción anterior no te apetece y tienes poco espacio, también puedes probar con una bicicleta estática. O si no tienes espacio para una bici, ¿qué tal unos pedales estáticos? Funcionan de manera muy sencilla, puedes verlo en esta guía que habla de ello. De esta manera podrás leer un libro, mirar la televisión, e incluso ver tu serie favorita de Netflix mientras pedaleas, algo que suena bastante bien.

¿Que no te gusta el deporte? No te gusta moverte, y no hay manera. Hay mucha gente que piensa así. Llegados a ese punto, es algo complicado empezar. Pero podríamos darle la vuelta a la tortilla.

Y ahora viene la pregunta para ti. ¿Cuántos deportes has probado? 

No me refiero a verlos en la televisión. ¿Con cuántos has sudado la camiseta de verdad? O simplemente, cuántos has practicado alguna vez.


Todavía no he conocido a nadie que los haya probado todos, pero sí a varias personas que después de probar unos cuantos, han encontrado una actividad que les gusta. 

Así que ya sabes, prueba unas cuantas disciplinas, sal a caminar por lugares diferentes, pide consejos a la gente que practica deporte, y empieza. Da el primer paso y sobre todo, lo más importante, disfrútalo

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